Tras pasar la noche en dependencias policiales a las que fueron conducidos tras el registro del Ayuntamiento en la mañana del martes, el alcalde de Astorga Arsenio García Fuertes y los concejales Pablo Peyuca, Manuel Ortiz y Javier Guzmán, junto al alcalde de Villarejo de Órbigo, Joaquín Llamas, declararon ante la jueza titular del juzgado numero 2 de instrucción de Astorga.
A primera hora de la tarde, fueron puestos en libertad sin medidas cautelares, pero en calidad de investigados por los cargos de prevaricación administrativa, cohecho, tráfico de influencias, falsedad de documentos públicos, fraude a la administración pública e inducción para cometer los anteriores delitos.
El asunto que se instruye en Astorga ha sido segregado en pieza separada del que se lleva en el juzgado de Badalona dentro de la operación Enredadera, por la gestión fraudulenta de regulaciones semafóricas, radares de tráfico y denuncias en medio centenar de municipios. Como el asunto suscitado en Astorga no tiene que ver con esto, sino con irregularidades administrativas en la adjudicación de obras en zonas deportivas y recreativas, se ha segregado la pieza separada |