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EL PENSAMIENTO ASTORGANO es un periódico histórico-cultural.
EL PENSAMIENTO ASTORGANO
EL PENSAMIENTO ASTORGANO es un periódico que edita, desde el 19 de junio de 1.997, la empresa Ediciones y Publicaciones Astorganas, S.A. (Edypsa) (editora del diario local El Faro Astorgano, del periódico guía para visitantes La Luz de Astorga, y de la Plataforma de Información Electrónica Astorga.com, que recoge también los contenidos de EL PENSAMIENTO).
Contenidos.- EL PENSAMIENTO ASTORGANO trata de recoger contenidos que enlacen con la larga historia y tradición cultural de Astorga, dando cabida a contenidos retrospectivos, culturales, artísticos, literarios, etc. Todo ello con un formato y tipografía semejante al que caraterizó al más veterano de los trisemanarios de la ciudad ,que se editó con esta cabecera desde 1.904 hasta 1.979.
Periodicidad.- La versión impresa de El Pensamiento se publica cada dos meses.
Difusión y venta.- El precio de venta al público de cada ejemplar (8 páginas de gran formato) es de 100 pesetas (IVA incluido). Se vende en los kioskos de la ciudad. La difusión estimada es de 2.200 ejemplares por cada número.
Es posible para los suscriptores de El Faro Astorgano complementear su suscripción por 600 pesetas al año, y recibir adicionalmente todos los ejemplares de El Pensamiento Astorgano, y 6 ejemplares de La Luz de Astorga (uno de cada dos). Es decir, que los suscriptores de El Faro recibirán un periódico más cada mes por 50 pesetas.
Publicidad.- EL PENSAMIENTO ASTORGANO no tiene publicidad, aunque sí un patrocinador (Caja España) con 1/3 de la última página.
Del número 11.208 de EL PESAMIENTO (primero de la nueva etapa) publicado el 20 de junio de 1.997:
A los 93 años de su fundación, y tras un paréntesis de 18 años
Astorga recupera El Pensamiento
Con este número, Astorga recupera la cabecera periodística de mayor historia en una ciudad en la que los periódicos diarios han sido numerosos, y de larga y sorprendente tradición.
El Pensamiento Astorgano fue fundado en 1.904 y se publicó de forma continuada hasta 1.979 (con un breve paréntesis en 1.976).
El día 24 de agosto de 1.979 aparecía el último número, el 11.207, algo descolgado del anterior que había visto la luz el 27 de julio. El postrer número era a la vez Extra de fiestas, y daba la mala noticia de que (¡casualidades del destino!) con El Pensamiento había desparecido Manuel Gervasi, uno de sus más fecundos y antiguos colaboradores. Magín G. Revillo era el director honorario y Paulino Sutil, director. La edición corría a cargo, como en los tres años anteriores, de la empresa Editorial Luz y Pensamiento y se imprimía desde 1.976, en talleres de el Diario de León.
En aquel número había pocas esperanzas sobre la continuidad del periódico: en el Editorial, la empresa cesante se lamentaba del poco apoyo de las instituciones, y se premiaba por el esfuerzo realizado hasta entonces; Juan Carlos Villacorta apelaba a la tradición y las esencias para enfatizar la necesidad de salvar El Pensamiento (Astorga tenía un doble movimiento: uno de traslación por una anchurosa órbita a través de los caminos de la trashumancia arriera y otro, de rotación cotidiana en torno a dos ejes, sus dos periódicos, El Pensamiento y La Luz, que establecían una bipolaridad saludable para la vida de la ciudad. Astorga prolongaba así con el ritmo alterno de sus trisemanarios la sobria claridad de esa luz que ha iluminado de coraje civil su historia y ese dinamismo interior que genera el culto a el pensamiento). Tan sólo Manuel Gervasi había dejado escrito un trabajo (que no pudo llegar a ver publicado pues murió atropellado el día 12 de agosto) en el que terminaba señalando espero seguir contando con el respeto y la comprensión entre mis compañeros, desterrando el insulto y la calumnia siempre en la búsqueda del bien general, aportando nuestros esfuerzos para que el periódico sea el portavoz de las necesidades de la ciudad donde seamos todos amigos, y que además sea cómoda sana y alegre...
Pero no fue posible. El Pensamiento desapareció. Sólo después de 10 meses reapareció El Faro enlazando con la tradición periodística de Astorga en una aventura que, felizmente, llega hasta el día de hoy. Pero El Faro quiso ser tributario de El Pensamiento. El número 0 que aparece el día 14 de junio de 1.980 se abre a la vez con un título y cabecera : El Faro Astorgano, El Pensamiento de todos, escrito además con la tipografía que durante 75 años encabezó El Pensamiento.
Hubiese sido el deseo de los impulsores de El Faro poder utilizar la cabecera de El Pensamiento Astorgano, pero por razones de titularidad de la misma en aquél momento no fue posible, y hubo que apelar a la generosidad de Lorenzo López Sancho para recuperar la nueva cabecera que correspondía a otro veterano trisemanario que durante muchos años editó su padre, Porfirio López.
El tiempo ha pasado, Astorga a través de Edypsa ha recuperado la cabecera tan ansiada (también la de La Luz de Astorga), y el proyecto empresarial que se lanzó en 1.980 está consolidado y en condiciones de afrontar nuevas aventuras.
De está forma, 18 años después, Astorga recupera a la vez sus trisemanarios La Luz y El Pensamiento reconvertidos ahora con nuevas periodicidades y contenidos. Mientras que La Luz será un periódico guía para visitantes y turistas, El Pensamiento aparecerá cada dos meses para ofrecer a sus lectores una selección de trabajos (rescatados de las hemerotecas y nuevos) que permitan acercarse a la historia de la ciudad y entornos, y a todos sus aspectos culturales, en un periódico que, incluso formalmente, quiere recordar la gravedad y seriedad de su larga tradición. Recupera en parte su gran formato y su tipografía y maneras, de forma que, con la tecnología que permiten los tiempos, Astorga recupera su periódico de siempre. Quién sabe si con el tiempo podrá mejorar su periodicidad (en principio bimestral), pero lo seguro es que con el apoyo de todos, sus contenidos serán del agrado de sus lectores.
Datos para una actualización de la historia del periodismo en Astorga
En este número 11.208 de El Pensamiento Astorgano se publica la parte correspondiente a prensa astorgana del trabajo Historia de la prensa leonesa de José Antonio Carro Celada editado en 1.984 dentro de la colección Breviarios de la calle del Pez. En sucesivos números de El Pensamiento aparecerán otros trabajos de José Antonio Carro (el mejor especialista en la materia) sobre la prensa astorgana en los que se recogen actualizaciones y referencias a otras publicaciones. Sin embargo, como anticipo, y a modo de recopilación de datos, se recogen seguidamente algunos que han de enlazar la historia que cuenta José Antonio (que termina a los finales de los 70) con la realidad actual. Posiblemente falta la perspectiva temporal necesaria para considerarlos historia y las reflexiones que en su día los enlazarán y darán sentido, pero no podían faltar estos datos (muchos de ellos suministrados por el propio José Antonio Carro) en un momento de tanta trascendencia para la prensa en Astorga.
- En 1.974 se publicaban en Astorga La Luz (lunes, miércoles y viernes) y El Pensamiento (martes, jueves y sábados) con una estructura empresarial diferente de la tradicional: Magín Revillo había vendido el periódico a Cornejo, propietario de la Luz, pero figuraba como director de las dos publicaciones que se tiraban en los talleres de La Luz en la calle López Peláez con todo el personal de la imprenta de La Luz, a los que se había añadido Luis Álvarez (El Músico) que procedía de los talleres de Revillo.
- Esta situación estable se rompe cuando el 27 de junio de 1.974 se jubila Magín Revillo (¡con 80 años!), y el 10 de enero de 1.975 aparecen los dos periódicos editados por una sociedad anónima, Editorial Luz y Pensamiento SA bajo la presidencia de Enrique Martínez Cornejo (editor de La Luz), y siendo el director Silverio de Legorburu Ovies (un joven periodista asturiano). Esta sociedad pasa ser presidida en mayo del mismo año por Felipe García, y de esta forma se mantienen los dos trisemanarios alternándose (aunque con una nueva y agresiva presentación impulsada por su director) hasta que el día 13 de abril de 1.976 desparecen ambos por problemas económicos.
- Se abre entonces un paréntesis de cuatro meses en los que Astorga (por primera vez en el siglo) no cuenta con ningún periódico. Felipe García intenta una reorganización empresarial agrupando los suscriptores de ambos y lanzando, en una nueva etapa, El Pensamiento Astorgano.
- El Pensamiento reaparece el 14 de agosto de 1.976 con el número 10.764. Se imprime ahora en los talleres de Diario de León y tiene 8 páginas de tamaño tabloide (frente a las 4 páginas de gran formato que habían tenido en las últimas décadas los periódicos de Astorga. Esta nueva etapa incorpora las mejoras de presentación que hacen posible el offset y especialmente en los primeros meses aparece con unos contenidos muy cuidados y una participación polémica en los problemas ciudadanos.
- Silverio de Legorburu conserva nominalmente el cargo de director, pero no llega a incorporarse al nuevo proyecto (impulsado desde el punto de vista periodístico por Alberto Matías), y el día 2 de junio de 1976 pasa a ser el director Paulino Sutil Juan (que permanecerá en el cargo hasta la desaparición de El Pensamiento, pero continuará luego en El Faro)
- Como se ha señalado, en los tres años que van desde el verano de 1976 hasta el del 79 El Pensamiento lo edita Editorial Luz y Pensamiento SA, propiedad de Felipe García. La redacción y administración están en la calle Alférez Provisional (sede de otras compañías del empresario), y se imprime en offset en talleres de Diario de León. En dicha sede de la calle Alférez Provisional tiene lugar un suceso de cierta relevancia que demuestra el tono crítico del periódico que defendía beligerantemente un urbanismo muy moderado (luchando contra la especulación y la construcción de grandes edificios en el centro de la ciudad destruyendo el patrimonio histórico). Esta postura le granjeó grandes luchas con poderes fácticos, y desembocaron en una agresión del entonces concejal Recadero Bautista a Alberto Matías a quién golpeó con un cenicero en cabeza (el cenicerazo fue llamado el episodio por la prensa nacional donde tuvo cierta repercusión).
- En esta época los colaboradores más habituales El Pensamiento eran Manuel Santiago Fernández, Ángel Jarrín, Fernando Gervasi (sobrino de Manuel Gervasi que al igual que Luis Álvarez (Un Músico) -dos veteranos tipógrafos- continuaba con su colaboración, Juan Carlos Villacorta (que nunca se ha alejado de la prensa de Astorga), José Antonio Carro, Ángel Presa y Camino Gallego quien durante un tiempo se ocupó de la edición. Ángel Fuerte del Valle y Alberto Matías mantuvieron durante estos años sendas columnas en la última página tituladas Astorga a vista de pájaro y Plaza Mayor. Vicente Ángel Pérez asumió el cargo de redactor jefe en la práctica, y al ir a Madrid fue sustituido por Isidro Martínez.
- Los costes de impresión se fueron disparando, y los altos precios puestos a la publicidad impidieron que este recurso financiase el periódico, por lo que las dificultades económicas fueron creciendo, y el 27 de julio de 1979 dejó de publicarse regularmente El Pensamiento, aunque en un último esfuerzo apareció un número especial (el 11.207) el día 24 de agosto de dicho año.
- A partir de aquél momento se inician los trabajos para conseguir que Astorga tuviera de nuevo un periódico. Alberto Matías encabeza el movimiento (con el objetivo de lograr una empresa con una amplia base accionarial e imprenta propia en Astorga) al que se suman la Junta Fundadores de Ediluz (que se mantiene, así como los principios de la publicación). José Bernardo Díez Rodríguez se suma enseguida al proyecto, y Félix Pacho da un empujón en Madrid. Germán Fernández, José Elías Gallegos Romero, Miguel García Gómez, José Elías Fernández de la Fuente y otros empresarios encabezan el accionariado que llega a incorporar 200 personas. En un proceso largo y complicado (del que quizá en algún número posterior queda dar noticia) se logra sacar un número 00 el día 24 de mayo de 1980, y un número 0 el día 14 de junio de 1.980.
- Por fin (21/6/80) aparece el número 1 de El Faro Astorgano (explicado ahora como Diario Regional Independiente) el día de junio de 1.980. Se redacta e imprime en un piso de la calle San Javier. Para ser considerado diario debe aparecer cinco veces a la semana, y de hecho lo hace los martes, jueves, viernes, sábados y lunes (si bien en la temporada de verano, cuando no hay fútbol, el número de los lunes se sustituye por El Faro del domingo).
- Paulino Sutil sigue siendo el director, y los redactores son Eugenio Giráldez y Mateo Benavides. Adolfo del Otero (un joven veterano trabajador de La Luz) es el responsable del taller. Con el tiempo, los puestos de redactores se van cambiando. Isidro Martínez se asienta como redactor Jefe y por el otro pasan Isidro Reyero, Ángel Laso, Áurea Santos, Merche Marín Agustín Gajate, Jesús Rodríguez, Jose Antonio Carnevalli, y algún otros, y a partir de 1990 está Enrique Ramos. Luis Ramos se ocupa de los deportes. Desde 1995 Paulino Sutil pasa por motivos profesionales largas temporadas fuera de Astorga e Isidro Martínez asume la dirección en funciones.
- En 1983 el periódico cambia a la sede de la calle de la Prensa Astorgana (que recibe en la misma fecha tal nombre), y desde entonces sigue una sólida andadura en la que ha habido personajes del año, inundaciones, polémicas, exclusivas...mas cosas buenas que malas. Es historia menuda para contar otro día.
Número 11.208 (junio de 1.997)
Número 11.209 (septiembre de 1.997)
Número 11.210 (diciembre de 1997)
Número 11.211 (marzo de 1998)
Número 11.213 (septiembre de 1998)
Número 11.214 (diciembre de 1998)
Número 11.215 (Febrero de 1999)
Número 11.216 (Abril de 1999)
Número 11.217 (junio 1999)
Numero 11.218 (agosto de 1999)
Numero 11.219. Octubre de 1999
Número 11.220 (Diciembre de 1999)
Número 11.221 (Febrero de 2000)
Numero 11.223 (Junio de 2000)
Número 11.224 (Agosto de 2000)
Número 11.225 Octubre de 2000
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